miércoles

el camino hacia las ruinas no es fácil
se bifurca, se contrae, da vueltas como un trompo
y a ultima hora no hay mañanas
ni senderos inservibles
todo arde
los pies, los ojos, las heridas
la sed se calma con canciones de rock
a veces siento el aroma de un perfume
y pienso sobre el nectar de la flor
aca no hay jugos instantaneos
si: el polvo seco del desierto
si: las largas sombras de la tarde
y unos corazones mutilados
que son cuadros de sonrisas que se caen
las levantas y te levantan
y nunca tienes nada que perder

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Las ruinas, el ardor, las heridas, el nectar y la sed... siempre la palabra demoledora. Siempre la dulzura brutal. A veces demasiado reviente. Pero al leerte cada vez más me enamoro.

Anónimo dijo...

¿QUÉ PASA CON TU BLOG? ¡NECESITO LEERTE! No lo abandones. No me abandones. Este libro apenas está en ciernes.

Miguel Eduardo Bórquez dijo...

muy buenas letras. Saludos.